Ha llegado el momento
La lactancia es la mejor forma de alimentar a tu bebé, sin embargo, llega un momento en que, por diversas razones, decides cambiar de la leche materna a la leche de fórmula o quieres darle a tu bebé una combinación de ambas.

Para dar este paso, es mejor hacerlo de forma paulatina, porque tu cuerpo necesita tiempo para reducir la producción de leche. También le da a tu hijo el tiempo que necesita para adaptarse a la leche de fórmula.

Si te has decidido por el uso de fórmula infantil, deberás consultar a tu médico, partera o profesional de la salud.

Si quieres combinar la lactancia con la leche de fórmula, es mejor esperar entre seis y ocho semanas, hasta que tu cuerpo se haya acostumbrado a la lactancia. Si deseas cambiar a la leche de fórmula de manera exclusiva, puedes hacerlo en cualquier momento. Independientemente de la decisión que tomes, ten en cuenta que el hecho de introducir una alimentación con fórmula reducirá la cantidad de leche materna. Una vez que has iniciado este proceso, será muy difícil dar marcha atrás.

La transición

Esta tabla te ayudará a dejar la lactancia poco a poco. Espera al menos 3 días para el siguiente paso, así le darás tiempo a tu hijo a que se acostumbre al nuevo proceso:

Si quieres combinar la lactancia y la leche de fórmula, sigue el paso 3: mantén la primera y la última toma con leche materna. Consulta siempre a tu médico, partera o a un profesional especializado. Recuerda que algunos bebés tardan más que otros en acostumbrarse a la leche de fórmula.

Aquí te mostramos otro ejemplo de transición progresiva de leche materna a leche de fórmula (también llamado destete progresivo). No hay una regla fija, lo más importante es que tú y tu pequeño estén cómodos; sigue tus instintos.

Si tienes que incorporarte al trabajo, una opción para ti puede ser extraer la leche materna y alternarla con la de fórmula. Algunas mujeres se extraen la leche antes de ir a trabajar o en el mismo lugar de trabajo. Hay empresas que tienen programas de apoyo a la lactancia con lugares acomodados para poder extraerse la leche. El caso es que pronto encontrarás una rutina que se adapte a tu forma de vida y a tu pequeño. Si ya te has decidido por una alimentación parcial con fórmula, es mejor que comiences unas semanas antes de empezar a trabajar para que los dos tengan tiempo de habituarse a las nuevas costumbres.

Alimentación con fórmula

Si te decidiste por la leche fórmula para alimentar a tu bebé, existen muchas opciones. Tu médico o partera te dirá qué tienes que tener en cuenta a la hora de elegir la alimentación con fórmula adecuada para él.

El paso a la leche de fórmula y las heces del bebé

El cambio de la leche materna a la alimentación con fórmula puede afectar a las deposiciones del bebé en cuanto al color, la frecuencia y la consistencia. Las heces pueden ser más duras que de costumbre, más olorosas y algo más oscuras; las defecaciones también puede que sean menos frecuentes. No te preocupes mucho. Estos cambios son completamente normales.